¿Por qué usar lunas tintadas?
Las lunas tintadas cumplen una función estética pero también ofrecen una funcionalidad práctica ya que aportan privacidad a los ocupantes del vehículo e impide que se reconozcan. Como dificultan la visibilidad del interior, si dejamos el coche durmiendo en la calle, puede ser un plus de seguridad, ya que si guardamos algo en el interior del coche, no se verá desde fuera.Las lunas tintadas también protegen del sol y de sus rayos ultravioleta, al mismo tiempo evitan que se sobrecaliente el interior del vehículo, por lo que se necesitará menos energía para enfriarlo, lo que supone un menor consumo de carburante. Otra de las ventajas del uso de este tipo de cristales es que evitan los deslumbramientos producidos por las luces delanteras de los coches que conducen detrás nuestra.
Por otro lado, las lunas tintadas ofrecen protección en caso de impacto, ya que si se rompiera una ventanilla, esta no proyectaría los trocitos de cristal porque la lámina de plástico que contienen no permitiría que estallaran. De esta manera los ocupantes no resultarían heridos con los cristales rotos. Ahora bien, sólo se pueden tintar los cristales traseros, por cuestiones de seguridad vial la ley prohíbe tintar las lunas delanteras.